¡La pucha, che...!
Los Argentinos, tantos años después, hablamos distintos idiomas, por eso no nos entendemos.
Así mientras unos ladran, otros maullan, mientras unos nadan sin que se les mojen las plumas, otros viven debajo del agua.
¡Qué problema!
Y mi perrito, hace unos días, decidió que lo mejor es volver a mear sobre una rueda.
miércoles, 7 de octubre de 2009
Suscribirse a:
Entradas (Atom)